Empresarios de bares, restaurantes y heladerías señalaron que la demanda fue creciendo progresivamente y que el pico fue en febrero. Lo obtenido permitió cubrir los costos fijos
El sector gastronómico comenzó un período de lenta pero continua reactivación, tras superar uno de los años más complejos para el rubro. Tanto restaurantes como heladerías y bares apostaron al verano para tratar de recuperar los ingresos que perdieron durante la etapa más estricta de aislamiento. Y si bien, las diferencias con los números de la época estival pasada son abismales, se vislumbran buenas expectativas para lo que resta del año.
Los empresarios del sector indicaron que el turismo local ayudó bastante a que el movimiento no cayera, sumado a fechas especiales –como el día de San Valentín – la recuperación comenzó a acelerarse un poco más. No obstante, aún se encuentra lejos de una comparación interanual válida, teniendo en cuenta no solo las restricciones horarias y de distanciamiento que siguen habiendo, sino también el contexto económico pospandémico.
De acuerdo a un informe de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (Came), Posadas e Iguazú siguen reactivándose paulatinamente de la mano del turismo provincial y nacional. “El sector gastronómico, luego de atravesar un panorama sumamente complejo, se encuentra reactivándose, a través de promociones especiales para recibir a los clientes, destacándose la oferta de circuitos de recitales, espectáculos en vivo, DJ; con los respectivos protocolos que fueron establecidos para cada actividad”, detallaron.
Puntualmente, desde Iguazú se señaló que el mes de febrero fue el mejor de la temporada, debido al aumento progresivo en el movimiento turístico, siendo el fin de semana de carnaval el mejor. Sin embargo, los empresarios indican que está muy lejos aún de una total recuperación del destino.
Restaurantes, con repunte
Positivo y con bastante movimiento. Con esos términos, referentes del restaurantes de Posadas definieron la demanda en los primeros meses del 2021, cuyo pico de concurrencia se notó sobre todo en febrero por los agasajos del día de los enamorados y los feriados por Carnaval.
“El movimiento fue creciendo cada día más desde que comenzó el año hasta la fecha, con una movida más que interesante para el sector, como ocurrió en nuestro local”, comentó Fernando Idzi, encargado de Café Vitrage. Indicó que entre la segunda y tercera semana de febrero se ubicó el pico de asistencia. “Tenemos una gran movida y demanda que, progresivamente, permitió la reactivación del rubro”, añadió en diálogo con El Territorio.
Por su parte Alberto Oleg, propietario de un restaurante capitalino que ofrece espectáculos en vivo, contó que la concurrencia fue creciendo luego del retorno de los shows en los locales que, a mediados de enero, habían sido suspendidos en Posadas. “Estamos recuperando gente que no teníamos antes, porque nuestro local apunta a un consumidor que, además de comer, desea apreciar un espectáculo musical. La suspensión de este tipo de eventos repercutió de lleno en la ocupación. Con el regreso, se volvió a la normalidad”, señaló el empresario. Entre viernes y domingo se concentra la demanda, días en los que la ocupación llega al 100% y se ofrece la participación de bandas para los shows musicales. En tanto, entre lunes y jueves, sólo se llega al 25% del total de la capacidad del restaurante.
Sobre el gasto promedio por familia, Oleg detalló que ronda los 2.500 pesos, importe que incluye la comida y bebida para unas cuatro personas.
En esta línea, consideró que “gran parte del movimiento se está concentrando en la Costanera, espacio que apunta a los jóvenes que están saliendo más. En el caso de las familias o personas mayores de 35 años son más cuidados con las salidas porque persiste cierto temor con la pandemia. Pero, en términos generales, la gente se anima a pegarse una vuelta y salir más”. En cuanto a la locación, el empresario señaló que los Food Trucks, instalados en las zonas costeras, “permiten competir y dar otras ofertas de consumición con comidas, que logran una mayor rotación de personas. En mi caso, la demanda es muy grande y amplié el número de mesas”.
Bar, protagonistas del verano
En tanto, propietarios de bares aseguraron que la temporada de verano resultó favorable para este segmento, siendo febrero el mes con mayor concurrencia a los locales.
Desde Berlín, un bar posadeño, aseguraron que “esta temporada resultó muy buena, y la gente respondió muy bien a los protocolos, pese a que hubo una disminución en la cantidad de personas por mesa, de diez a cinco”. Para ello, debieron agregar más mesas para abastecer la demanda, dentro de los márgenes establecidos por protocolo.
“Febrero fue el mes más movido para la actividad y para el bar porque enero fue lluvioso, y eso nos impactó porque brindamos un servicio al aire libre”, detallaron. En cuanto al gasto promedio se ubicó en 700 pesos por personas. Sobre los productos más solicitados por la clientela, la cerveza artesanal y la picada fueron las que ganaron en la preferencia. En esta línea, desde el comercio recalcaron que la materia prima sufrió incrementos en los valores, como pasó con la muzzarella, el aceite y las verduras, que impactaron en los costos fijos.
Por su parte, Francisco Souza, uno de los propietarios de Amarú Café Resto Bar (ubicado en el microcentro posadeño) y Amarú Resto Bar (en la Costanera), explicó que “en lo que es café estamos un poco bajos por la temporada, pero sí en la Costanera se repuntó con la diferencia de que el año pasado teníamos mucho turismo nacional e internacional, mientras que este año ese público no lo tenemos, sumado a que el turismo nacional viene muy pobre”.
“La gente de Posadas acompañó mucho, primero fueron saliendo los grupos etarios jóvenes y después empezaron las familias. Sí hubo estancamiento cuando se incrementaron los casos en la provincia, lo que bajó el número de clientes durante unas dos o tres semanas. Pero en las últimas semanas, sobre todo el 14 de febrero, se trabajó muy bien”, remarcó.
Al tiempo que sostuvo que antes el movimiento era más continuo, pero ahora se enfoca más en los fines de semana. No obstante, más allá de la pandemia, Souza manifestó que lo que más dificulta el trabajo es la suba de materia prima. “Van aumentando de manera aleatoria y a veces no se puede trasladar, entonces los márgenes de ingreso disminuyen mucho. La asistencia de clientes depende mucho de la condición económica”, apuntó.
Miguel Ipolito, propietario de un bar de Eldorado, manifestó que “el movimiento fue bueno, principalmente en febrero por el día de los enamorados y Carnaval; una situación muy distinta a la vivida durante enero porque las lluvias complicaron mucho la asistencia al bar”.
El empresario, que era dueño de un boliche y debió reconvertirse para seguir en pie, explicó que las ventas registradas en los primeros meses del 2021 le permitieron cubrir los costos fijos y el abono del salario para el personal del local, aunque recalcó que los números son distintos a los registrados en 2020, cuando se dedicaba de lleno al boliche. “El movimiento es diferente, porque Eldorado no es Iguazú que tiene picos como lo suelen registran en temporadas. Fue un año atípico y algo nuevo para mí. Pero el movimiento fue bueno dentro de todo, aunque necesitamos más horas para compensar”, mencionó.
Mayor demanda en heladerías
De la misma manera, las heladerías comenzaron a repuntar las ventas en la época veraniega. Desde Polaris, la gerente Mariana Svetas, expresó en diálogo con el programa Acá te lo Contamos por Radioactiva 100.7 que “al principio, para todo lo que tenía que ver con estar en la casa fue un gran refugio el helado, se destacó el delivery, la pandemia nos obligó a apurarnos y tener esa opción. Pero cuando se fue liberando el aislamiento, y como todavía tratamos de no salir tanto, vemos muchos clientes más adultos, se venden mucho los palitos que llevan a las casas para consumir en familia”.
“Mantuvimos las ventas gracias al delivery, lo que hizo que la curva siguiera pareja. No superaron las ventas pero porque había mucha incertidumbre entonces los gustitos se daban medidos, por eso para nosotros, mantener las ventas fue ganar en este contexto”, dijo.
Y añadió: “Ahora se está normalizando mucho el consumo, con sabores frescos. La gente empezó a salir y quiere productos frescos y livianos. Sacamos un batido de limón, jengibre y menta con agua y nos está sorprendiendo en la venta”.
Extienden la temporada de balnearios
Isaac Villalba, director de balnearios de Posadas, explicó que el balneario Costa Sur sigue en obra. “Se logró hacer la mayoría de las cosas pero igualmente quedan obras pendientes, por eso se le recomienda a la gente los lugares seguros lejos de las máquinas”, dijo.
Apuntó que en marzo estarán activos los balnearios, con horarios de permanencia en el agua de 9 a 19 horas, mientras que en el sector de arena hasta las 22. En tanto, en los food truck se extiende el horario hasta el horario permitido (1 de la mañana entre semana y las 2 los fines de semana).
Asimismo, contó que se piensa continuar con el trabajo para que los balnearios queden activos todo el año, con variadas ofertas. “Vemos gente que asiste en diferentes horarios, a la mañana, tarde, noche”, expresó.
En cifras
$ 2.500
Es aproximadamente el promedio de gastos en los restaurantes posadeños, incluyendo comida y bebida para unas cuatro personas.