Al menos 78.985 toneladas de “basura tecnológica” fueron recolectadas para extraer el oro, plata y bronce con el que se fabricaron las medallas de estos juegos.
Los Juegos Olímpicos son las justas deportivas más importantes del mundo, ya que reúnen en un solo lugar a los atletas más talentosos de todo el planeta, con el fin de saber cuál de ellos es el mejor en su respectivo deporte y categoría. Para esto, desde la primera edición de los JJ.OO. modernos, que se llevó a cabo en Atenas en 1896, el Comité Olímpico Internacional decidió otorgar medallas (plata y bronce) como premio al mérito de los deportistas.
No fue sino hasta 1904, en los juegos de San Luis, Misuri, (Estados Unidos), que se introdujo la medalla de oro, para finalmente premiar como lo han hecho hasta Tokio 2020: oro para el primer lugar, plata para el segundo y bronce para el tercero.
Ahora bien, pensando en que este no es un evento cualquiera, sino que una cita con la historia, Japón decidió poner su sello en las medallas de Tokio 2020, convirtiendo a la tecnología y el reciclaje como principales protagonistas.
“Para producir estas valiosas medallas, el Comité Organizador de los Juegos Olímpicos y Paralímpicos de Tokio 2020 llevó a cabo el “Proyecto Medalla Tokio 2020”, con el que recolectó pequeños dispositivos electrónicos como teléfonos móviles usados de todo Japón. Este proyecto convierte a Tokio 2020 en los primeros Juegos Olímpicos de la historia en involucrar a los ciudadanos en la producción de las medallas y en fabricarlas con metales reciclados”, explicó el Comité Olímpico Internacional (COI), por medio de un comunicado publicado en su página oficial.
Asimismo, el COI informó que para estos juegos se fabricaron aproximadamente cinco mil medallas, cuyo material de fabricación fue extraído 100 % de los celulares recolectados en el país asiático, entre el 1 de abril de 2017 y el 31 de marzo de 2019. Esto quiere decir que Japón no solo marcó un hito en la fabricación de sus medallas, sino que también colaboró de manera exitosa y completa con el plan de reciclaje nacional e incluso mundial.
Los datos tras el ‘Proyecto Medalla Tokio 2020’
La máxima autoridad de la competencia olímpica dio detalles aún más específicos de lo que se logró con este proyecto, siendo algunos de los más importantes los que se presentarán a continuación:
1. El COI reveló que se usaron al menos unas 78.985 toneladas de “basura tecnológica”, que incluía, en su mayoría, “pequeños dispositivos electrónicos usados, incluidos teléfonos móviles”. Para esta tarea, las autoridades municipales de Japón designaron representantes que se encargaron de la recolección de los desechos. Igualmente, se tuvo participación de la empresa privada, siendo la donación más generosa los más de 6,21 millones de celulares usados que entregaron las tiendas NTT Docomo.
2. Tras la “depuración” de materiales, los japoneses lograron recoger aproximadamente 32 kg de oro, 3.500 kg de plata y 2.200 kg de bronce; por supuesto, hasta el último gramo de estos metales se usaron en la fabricación de las medallas.
3. Otro dato sorprendente y que refleja la unión del pueblo japonés, es que el 90 % de las regiones que dividen Japón (barrios, ciudades, pueblos o aldeas) participaron de este proyecto.
4. Tras la recolección de todo el material, se inició con el proceso de fabricación de las medallas, las cuales se componen de los siguientes materiales: las de oro tienen una base de plata bañada con más de seis gramos de oro; las de plata se componen en su totalidad de ese material, mientras que las de bronce tienen un latón rojo que se fabrica con un 95 % de cobre y un 5 % de zinc.
5. Por último, las autoridades japonesas informaron que las cintas que adornan las medallas también fueron elaboradas con material reciclado. “Fibras de poliéster recicladas químicamente, que producen menos CO2 durante su proceso de fabricación”, afirmaron.