Quien no haya iniciado acciones penales alguna vez es poco probable que haya escuchado hablar sobre la prescripción. Les sobrevivientes adultas de abuso en la infancia (ASI) solemos escuchar bastante esta palabrita en los juzgados. Se trata de los plazos en los cuales la Justicia dice que se puede investigar un hecho.
Después ya no, no importa si sos abusador ni violador de menores, si pasó el tiempo máximo de la pena es probable que la justicia te diga “no te preocupes campeón”. PERO, que una causa esté prescripta no significa que el denunciado sea inocente, solamente significa que habrá impunidad y otro abusador suelto.
Bueno, yo soy denunciante de ASI en la adultez (e incluso mi tesis de grado es sobre el acceso a la justica de sobrevivientes de ASI en Posadas) y ayer con mis compañeras de la Campaña contra la Prescripción de los delitos de violencia sexual dimos un conversatorio sobre la violencia sexual y la prescripción en el marco del #19N por el Día Internacional contra el abuso sexual en las infancias. Todo esto porque hay mucha desinformación y tergiversación también. Se sigue repitiendo en redes y medios de comunicación que “los abusos sexuales no prescriben”. Y esto no es así.
Recién desde 2011 con la Ley Piazza y luego con la Ley Kunath, en 2015, los plazos legales se modificaron y permitieron denunciar a las víctimas de ASI…pero las leyes no son retroactivas. Esto significa que -en teoría- no prescriben para los casos de 2011 en adelante. Pareciera que los abusos que ocurrieron antes de ese tiempo no importan.
Por eso acá estamos les sobrevivientes adultas de ASI exigiendo Justicia y siendo totalmente ignorades. Con nuestras causas juntando polvo en los juzgados, sabiendo que no somos prioridad de nadie, con jueces que archivan nuestras causas, con expedientes sin carátulas, con causas prescriptas, con abusadores sobreseídos y con más trabas que otra cosa. Hay pocas excepciones pero no son la regla. Esto pasa acá en Posadas, en Buenos Aires, y en todos lados. Sin embargo, seguimos firmes, hermanadas y con ganas de cambiarlo todo, y sabemos que lo haremos.